Fue en un parque de la capital, pocos dÃas después de llegar a Cuba. Dos ancianos se daban dinero uno a otro -apenas unos pocos pesos- cada vez que pasaba un automóvil. Le estaban apostando al número de la matricula, par o impar.
En 1959 los revolucionarios cubanos asaltaron y destruyeron todos los casinos de la capital, iniciando una campaña contra el juego que se proyecta hasta nuestros dÃas y que casi no tiene fisuras en lo oficial.
En el peor momento económico del paÃs, durante la crisis de los 90, se rechazó la idea de abrir casinos en los cayos (islas), para los turistas extranjeros y aún hoy se exige a los cruceros cerrar sus salas de juego al entrar en los puertos cubanos.
Ni la popular loterÃa ni la deportiva quiniela: oficialmente no se puede jugar dinero en ninguna parte a pesar de lo cual los jugadores, como aquel par de ancianos del parque, se las ingenian de mil maneras para evadir las restricciones.
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Me contó un latinoamericano que la primera vez que visitó Cuba fue en los 70, siendo muy joven, terriblemente indocumentado y con apenas dinero, sin embargo nada le impidió disfrutar del sexo de forma apasionada.
Su gran anécdota es que una patrulla guardafrontera lo detectó haciendo el amor con una chica escondidos en la playa, realizaron las comprobaciones de documentos y les explicaron que estaba prohibido pernoctar debido a las infiltraciones de la CIA.
De inmediato les respondió que enseguida saldrÃan de la playa pero el jefe de los militares lo interrumpió con una sonrisa cómplice y le dijo: "si, si, pero termine primero, termine", la seguridad podÃa esperar.
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"No te imaginas cuánto se sufre cuando eres un niño, inconsciente aún de tu homosexualidad y no entiendes por qué todos te aÃslan, por qué a los demás no los dejan jugar contigo o por qué te insultan en la calle".
"Jorge" canta en un grupo cubano bastante reconocido y es abiertamente gay, por momentos parece casi como si sintiera orgullo de serlo, pero cuando sus recuerdos llegan a la infancia el dolor se refleja en su rostro.
Creo que recién después de aquella reunión con artistas cubanos fue que entendà el verdadero grado de crueldad de la homofobia, la dimensión del drama que enfrentan algunos seres humanos por el solo hecho de sentir distinto.
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![policlinico-432.jpg](/staticarchive/db7fdf4bb170cde577fbf91177d5cec17a745320.jpg)
Hace muy poco tiempo me lesioné el hombro derecho haciendo ejercicios sin previo calentamiento. El médico me diagnosticó tendinitis y me recetó calmantes, antiinflamatorios y fisioterapia.
Esperando que me recomendara algún hospital especializado, le pregunté donde podÃa realizar la fisioterapia. Sin saber mi direccion me respondió muy naturalmente que fuera al policlÃnico de mi barrio.
Con su remisión y sin muchas esperanzas de encontrar lo necesario, me dirigà al policlÃnico del Casino Deportivo, donde me trasladaron al ala de fisioterapia, una construcción nueva al fondo del local.
Entrar allà fue como cambiar de paÃs: el local está limpio, huele bien, la luz y el aire entra por todas sus ventanas y por si esto fuera poco el personal atiende a los pacientes con gran amabilidad.
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