¿Sabemos dónde vivimos?
La semana pasada, buscando información para una galería de fotos sobre
que se me ocurrió ofrecerle a mis jefes en Londres, me encontré con el libro "Cairo, Los Años Gloriosos" del periodista y escritor egipcio Samir Raafat.
Raafat, quien tiene además en internet dedicado al Cairo, plantea en la introducción del libro dos ideas que bien podrían aplicarse a nuestras urbes latinoamericanas: Uno, la ausencia de una estricta legislación urbana destruyó el estilo arquitectónico de la capital egipcia. Dos, a nadie parece importarle un bledo averiguar sobre el pasado del lugar donde vive.
Gracias a este periodista, yo supe por ejemplo que una emperatriz y también un príncipe con su princesa se quedaron en el hotel ubicado a pocas cuadras de mi casa, que allí pasó una temporada una famosa escritora de historias policiales y que en estas calles se produjeron dos asesinatos que sacudieron al Imperio Británico.
Fascinado por las viejas casonas que sobreviven en mi nuevo barrio, que en realidad es una isla rodeada por dos brazos del Nilo, comencé el libro por la mitad, por el capítulo dedicado a la isla de Zamalek.
Así me enteré que el hijo del famoso pintor británico William Blake construyó la mayoría de estas residencias para que las habitaran los funcionarios británicos que durante 70 años rigieron este país.
Pues sepa usted que este periodista de la 鶹ҳ de Londres -medio creado en su momento para hacerle llegar noticias a los súbditos de su majestad que vivían en los países colonizados, dominados o económicamente influenciados- vino a parar al corazón del antiguo imperio en Egipto.
Barrio de calles arboladas, embajadas, cafés de París y restaurantes italianos, Zamalek es el lugar por excelencia de los extranjeros como yo, amantes de lo Oriental siempre y cuando nos rodee lo Occidental.
Pero entre sus viejas residencias, su club exclusivo y su hotel 5 estrellas, la isla posee también una serie de edificios horribles, mediocres y espantosos.
"¿Qué pasaría si el gobernador del Cairo decidiera hacerle un regalo a la capital del país? Una sugerencia sería destruir uno de sus peores dolores a la vista y enviar un claro mensaje a los culpables urbanos del pasado y del presente que los días en que cada uno hacía lo que quería con la línea del horizonte han terminado".
Este tipo de párrafos dedicados a un torre abominable, que comenzó a construirse durante los 80's y aún no está terminada, son los que hacen entretenido el libro de Raafat, incluso para un ignorante de la arquitectura como el que escribre este blog.
En otro fragmento, el autor califica las décadas del 80 y del 90 en Egipto como "temporada de terrorismo arquitectónico, cuando en ausencia de una sociedad civil y un sistema democrático, glotones hombres de negocios secundados por políticos corruptos destruyeron nuestras ciudades".
Yo recuerdo, en mi querida Buenos Aires, un fenómeno similar, con los mismos actores y como única excepción al caso egipcio la existencia de un sistema democrático, lo cual hace más doloroso -salvando gloriosas excepciones- el silencio de la sociedad civil. Y aquí entra en juego la cuestión del querer saber un poco más del lugar donde uno vive.
"La falta de educación y de conocimiento sobre la historia de nuestra sociedad es suficientemente peligrosa, pero combinada con una absoluta falta de orgullo cívico se vuelve alarmante. Nadie sabe y a nadie le importa", sentencia el periodista egipcio en su introducción... y tiene razón.
A mí, que la Historia me ha gustado desde pequeño, nunca me importó conocer el pasado de los barrios donde crecí. Como era joven -y a los 20 años uno cree que la ciudad donde vive se fundó el día de nuestro nacimiento- no hice preguntas ni esperé respuestas.
Cuando "mis propias" torres abominables comenzaron a surgir de la entrañas de los 100 barrios porteños, yo no me preocupé por saber sobre qué cimientos se levantaba esa Argentina del dólar barato. Por eso me da pena interesarme recién ahora por la historia del lugar donde vivo, cuando ya no vivo en mi lugar.
En esta Zamalek lejana, leo que en el club ubicado a dos cuadras al sur de mi casa los británicos celebraban sus carreras de caballos, sus partidos de cricket, sus contiendas de golf, mientras decidían que egipcio podía ser miembro -o no- de tan exclusivo recinto.
Descubro que dos cuadras al norte vivía el sirdar, funcionario británico que oficiaba como jefe del Ejército de Egipto y gobernador de Sudán, y que uno de ellos, sir Lee Stack, fue asesinado por nacionalistas egipcios el 19 de noviembre de 1924.
Otro asesinato local fue el de Lord Moyne, el 6 de noviembre de 1944, a manos de dos militantes zionistas, cuando Israel no existía y Palestina era dominada por los mismos que jugaban al cricket en mi club vecino.
Con tanto crimen, no habría de extrañar que en el hotel que se encuentra dos cuadras al oeste, hoy regenteado por una famosa cadena estadounidense, pasó unas vacaciones de tres meses Agatha Christie junto a su madre en 1910.
El hotel fue construido para la visita de la emperatriz francesa Eugene, quien había programado un viaje al Cairo en 1869 para asistir a la inauguración del Canal de Suez. Aunque sus habitaciones fueron diseñadas tal cual eran sus aposentos reales en el palacio francés, nadie se percató de que los primeros miembros de la realeza en llegar fueron el príncipe y la princesa de Gales.
Lo extraño es que a partir de estos conocimientos he desarrollado una nueva forma de hacer turismo. Más allá de visitar el Museo Egipcio, pasearme por el barrio islámico de Khan al-Khalili o entrar a las iglesias y sinagogas más antiguas del barrio copto, ahora busco viejos edificios que tengan una buena historia que contar.
El otro día, por ejemplo, en pleno centro de la ciudad, me paré en frente de una vieja chocolatería que según "Cairo, Los Años Gloriosos" fue en su tiempo la más famosa de la capital egipcia. El último rey que tuvo esta nación mandó a comprar aquí 100 kilos de chocolate para llevar a Londres. ¿La destinataria? La princesa Isabel, hoy reina del imperio que ya no es.
Seguramente, sin haber leído el libro,
me hubiera parecido otro más de los tantos cafés que tiene el Cairo. Me pregunto ahora por cuántas puertas de Buenos Aires pasé en mi juventud sin hacer una mínima reverencia a sus fantasmas.
¿Y ustedes? ¿Qué saben del lugar en donde viven?
Por sugerencia de Vanina, vieja amiga de la casa y autora del blog , tengo ahora un lugar en
para "colgar" todas las fotos que no entran en este espacio. Es y ya coloqué algunas postales de Zamalek, mi idea es empezar por mi barrio y luego expandirme.
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Bueno el lugar donde vivo como muchos otros en Venezuela creiò luego de que descubriò el petròleo en nuestro paìs, hasta antes de eso era màs un pueblo grande que una ciudad, te puedo decir que hasta màs o menos los años 50 en el solo habìa un liceo, el cual no solo veian clases los muchachos de Barquisimeto, sino tambièn los de otros pueblos del Estado Lara, es màs en esa epoca solo habiàn 2 o 3 universidades en todo el paìs.
En mi cuidad hay una casa que es muy conocida por todos, pues al menos una vez han pasado por allì, pero que no muchos saben su historia. Es una casa que fue mandada a hacer por un rico de aquella epoca a imagen de una casa que viò en Francia, y al parecer la mandò a construir asì para obsequiarsela a su enamorada (la parte de la enamorada no lo tengo bien claro) es una casa muy grande y que en su momento debiò haber sido algo impresionante, lamentablemente hoy està en un estado casi de ruinas, y debido a un problema legal no se ha podido vender, donar o ser cedida.
Como esa hay otras historias, de otros edificios, pero esa es una de las que màs recuerdo.
Saludos.
En realidad, se poco de mi pueblo, una historia olvidada, talvez a propósito.
Por eso me gustan las fotografías viejas, son una muestra de lo que fue y que hemos dejado en el subconciente social.
El otro día escuchaba un radioclip en www.radialistas.net donde llamaban a ejercer nuestro derecho a recordar (no establecido en ninguna declaración) porque al olvidar nuestra historia perdemos nuestra identidad, de donde somos y hacia donde vamos. Y muy importante, los motivos por los que ejercemos ciertas acciones.
Es bueno que te intereses por tu pueblo también, no importa que estés lejos.
Sé que donde estudio es la ciudad más antigua de América y que tiene la pirámide más grande del mundo en lo que a la base se refiere. Lo primero lo averigüé en Wikipedia, y lo segundo de boca de un estudiante austriaco, cuando salíamos de un bar de jazz ubicado frente a la mismísima edificación.
Por otra parte, siempre he pensado que la Historia es importantísima. Tanto que, a mi parecer, se debería presentar a nivel nacional un examen de dicha materia para poder acceder a la universidad. Uno le retribuye al estado, por haberlo educado, conociendo su historia.
Verdaderamente fuiste directo al punto como el autor del libro que mencionas, en realidad uno asume que en nuestras ciudades jamás ha pasado nada importante, tenemos la idea de que las cosas importantes solo han pasado en las ciudades mencionadas en libros de historia universal y que en el caso de los que vivimos en ciudades pequeñas, tendemos a ser minimalistas con respecto a la importancia de nuestras ciudades y sus lugares. Felicidades por tu blog
Matias: Se donde vivo porque vi hacer el AEROPUERTO INTERNACIONAL DE EZEIZA, hoy GENERAL MINISTRO PISTARINI. Cuando contaba con 7 años me trajeron a visitar este lugar, jamas pense vivir aquí, pero las vueltas de la vida y por el trabajo de mi esposo hace 47 años que disfruto de un hermoso BARRIO E.ECHEVERRIA, con un bozque de 7.000 hectareas, cuenta con árboles únicos en el mundo, todo tipo de aves, de distitas especies. Este barrio fué construido por las manos de inmigrantes, Italianos, Españoles, Croatas, Polacos, etc, cuenta con una autopista cubierta por hermosos platanos, sauces lacustres,laureles de todos colores, corona de novia,imperial y pinos en todas sus caracteristicas. Este bozque, fué diseñado y realizado por el mismo General Pistarini y la Iglesia Nuestra SRA. de Loreto, Patrona de la Fuerza Aerea, cuenta con imagenes y marmoles traidos desde Italia, por la Sra. María Pistarini esposa del visionario de esta magnifica obra. Este es tu querido pais Matias, es un relato de tu compatriota Matilde, besos para todos y uno especial a HAKIM.
Hermoso post. Eso sí, ya te reclamo en nombre de todos tus lectores (por favor! estimados colegas lectores ayúdenme en este pedido!!:poné una galería de fotos. Hay millones de herramentas en Internet (muy fáciles de usar para que subas allí las increíbles fotos que supongo estrás sacando.
Dicho esto, al post. A mi siempre me gustó saber la historias de las ciudades. Cuando camino por Av. de Mayo, Diagonal Norte, por el barrio de San Telmo, Palermo Chico (donde están las fastuosas mansiones devenidas en embajadas) o Recoleta trato de imaginar que historia encierran.
Lamentanblemente, acá pasa -como decís vos- los mismo que en El Cairo: no hay, o hay pocas, leyes que preserven el patrimonio arquitectónico de la Ciudad.
Las modernas torres comienzan a "pisar" las bellos edificios, casas y Petit Hotels tan característicos del 1800.
Por suerte, hay mucho vecinos que cominezan a movilizarse para que se frenen éstas demoliciones, o al menos, se regule la construcción.
Les paso algunos links para que conozcan lo que pasa en BsAs:
Tristemente Mexico ha carecido de memoria histórica desde el tiempo de la colonia, parece que no nos preocupamos por lo que pasó ayer, ya no solo en el ambito cultural, sino también en el político y eso nos ha traido y traerá muchos problemas.
En Guadalajara (la ciudad donde yo vivo) se han destruido y construido infinidad de edificios, se ha tirado patrimonio historico y se ha demolido parte de lo que nos hace ser como somos, tengo un amigo argentino que dice: para entender a los tapatíos -gentilicio de guadalajara- tienes que vivir entre ellos minimo 3 años =P
Yo sé que había antes de mi nacimiento por mi abuelo, que me contaba historias interminables acerca del tema... sospiro...
Apoyo que publiques una galeria de fotos. He vivido en varios lugares y siempre me intereso saber que habìa antes. Te puedo decir que el lugar donde vivo estropeo un poco el panorama del lugar, anteriormente era un club donde los niños del lugar jugaban, por alguna extraña razòn vendieron el predio y ahora hay 1000 casas en este lugar. La cuidad era un pueblo de descanso en la era de la Colonia, era una parada antes de llegar al Distrito Federal. Aùn se conservan calles empedradas e iglesias por todas partes, la modernizacipòn llego despues de la revoluciòn y el transporte llego apenas 30 años. Me parece interesane saber como cambian las cosas, pues nunca se detiene y que en 10 años este lugar se vera diferente. Saludos y un excelente Blog.
Me olvidé! Si podés poné la dirección de la Galería como Vínculo o en Acerca de este blog.
sls
Matías que grata sorprsa dejaste esta tarde en mi blog!
¡La galería de fotos de Nuestro Blogger (ahora en el Cairo)!
Sí, ya sé, que te tomará un trabajo adicional, pero si pudieras compartir las fotos de tus notas allí con nosotros sería buenísimo.
Además, te agradezco, en nombre de todos tus lectores, no sólo por dejarnos ser parte de este espacio, sino por "escucharnos". ;)
Bueno, como ex estudiante de Historia, me interesó mucho siempre conocer sobre Buenos Aires (donde nací y vivo) y Quilmes, ciudad en la que me crié.
Saludos.
Estimado Matías,"Nada se pierde,nada se destruye,todo se transforma",paradojalmente la única constante inmutable.En lo personal no podria pensar en Egipto sin sus Pirámides o en Londres sin el BigBen,hoy bajo cuidadosa restauración.La arquitectura nos habla de épocas ,personas, ideas o costumbres de ciudades o barrios,y esto es como un camino por el tiempo,que recorremos embelesados al oir su reclamo a nuestra atención.Conozco mi barrio,mi ciudad,porque me he hecho el tiempo para ello,pero he priorizado siempre la historia viva de los lugares,"El Don Juán y la Doña Maria"con sus anécdotas y vivencias entrelazadas al lugar.Tal vez deberíamos mostrar en Flickr imágenes que ilustren esos lugares y su carácter.Tu interés por internarte en ese fascinante y complejo cosmos de Oriente y adaptarte a sus pautas va por buén rumbo,quedaremos esperando por las imágenes y sus historias...Un saludo a María y Hakim ,y otro para tí.Mario
Me parece fantastico tu bogg!!!! es la primera vez que escribo. Pues te dire que yo si conozco la ciudad donde vivo se que es la mas antigua de america, en donde cristobal colon decidio hacer colonizacion, se que por eso en mi ciudad tengo el primer hospital, la primera catedral,el primer ayuntamiento, ruinas del primer fuerte, las primeras calles,la primera universidad del continente americanoy asi infinidades de cosas que aqui fueron primero. Vivo en una ciudad con un casco colonial lleno de primicias y protagonista de hechos historicos impresionntes.Felicidades por tu blogg.
Matía, ganó 鶹ҳ Mundo enviándote a Egipto, de la que poco más que su historia faraónica se conoce en mi país. La capital de Cuba tiene una maqueta que presume de ser la segunda en tamaño después de la de NY, y realmente te permite conocer de una ojeada, literalmente, la Historia de la ciudad y el país. La inmensa mayoría de ella se construyó antes de 1959, y lo que se ha hecho después, excepto algún hotel extranjero, es posible representarlo con un cubo, poco más o menos. A menos que trabajes con el historiador de la ciudad, no hay modo de conocer de verdad qué y quién estuvo detrás de cada construcción. Ojalá pudiéramos conocer La Habana como estás tú conociendo El Cairo. Encomiable trabajo el tuyo el de hacernos pensar y divertirnos con tus amenos comentarios. Por el bien de los tres, María, Joaquín y tú, espero que tus jefes te valoren como mereces. Un saludo para el trío.